Opinión

No digas Real Madrid, di Rey de Europa

   El Real Madrid, por segundo año consecutivo se ha clasificado para la final de la Champions Ligue, erigiéndose una vez más como el rey de Europa. Los hechos así lo demuestran: tres finales en los últimos cuatro años; alcanza su 15ª final de las que ha ganado 11. Hasta ahora ningún equipo desde 1960 se había clasificado finalista de forma consecutiva;además de haberse clasificado semifinalista en  los últimos siete años. ¿Hay quien de más?. Nadie.

   En un partido apasionante por todo lo que ha conllevado, el Madrid aunque perdió por 2-1 frente a un Atlético que vendió cara su derrota, la renta del partido de ida (3-0) a la postre le  fue suficiente para meterse otro año más en la final europea. Fue una derrota dulce que le devuelve a su cita preferida, la final de la copa de Europa

      El último  derbi en el Calderón hizo honor a la historia de dos grandes equipos, que nos ofrecieron un hermoso espectáculo lleno de pasión,orgullo y mucha adrenalina. Ganó el fútbol. Las dos aficiones pueden estar orgullosas de su equipo. Los dos sacaron a relucir ese orgullo bien entendido que cada uno administró según sus intereses y forma de entender. Los dos fueron igual de válidos.

   El Atlético salió como se preveía con el cuchillo entre los dientes,a tumba abierta, poniendo trampas y  presionando hasta la extenuación a los blancos que esta vez vistieron de negro. Los rojiblancos respondían así  al conjuro frente a su afición la víspera del partido. Y lo logró con una puesta en escena volcánica que hizo estremecer los muros del Madrid que en esos minutos iniciales, no sabia como jugarle a un Atlético pletórico que creía en el milagro. Más aún cuando a los 16 minutos exactos ganaba por 2-0, con goles de Saúl que en el 12 remataba  perfectamente de cabeza un saque de esquina; y después en el 16, Griezman de penalti, lograba el segundo tanto que ponía en órbita a todo el Calderón, que era un grito unánime;”creemos, pues podemos”.

    El equipo de Simeone en apenas un cuarto de hora había logrado lo que tenía planeado: meter el miedo en el cuerpo al Madrid para que le entrase las dudas. Pero curiosamente, el 2-O hizo más daño a los rojiblancos que a los  madridistas, porque a partir de ese momento, el Madrid se hizo dueño de la situación con un juego de toque y de control, perfectamente guiado por un   Modric imperial, y un fuera de serie como Isco, que sigue en estado de gracia.

      El Atlético en ese inicio arrollador con más empuje que juego pero con una fe y entrega encomiable, fue apagándose por el tremendo esfuerzo de ese arranque brutal.  El Madrid en cambio, cuando el juego se sosegó, empezó a crecer hasta dominar el tempo de todo el partido. 

    Los del Cholo Simeone parecía que  se tomaban un respiro y los de Zidane se sobreponían al vendaval  del rival, en el inicio. Eso parecía, pero el control madridista   ya fue una constante durante todo el partido,imponiendo su fútbol ante  las acometidas  episódicas de los rojiblancos . El centro del campo comandado por Modric, Kroos, Casemiro e Isco, fue la clave del partido. Modric,sacó el compás e Isco, la genialidad.

    El Real Madrid volvió a ser la bestia negra del Atlético en Champions:cuatro años seguidos. Pero  el último partido europeo en el Calderón nos deja la alegría del Madrid, camino, creo que merecidamente  de su decimoquinta final, y la vergüenza torera y el orgullo de un Atlético que ha luchado y le hizo probar el miedo a su rival en un comienzo conmovedor. Justicia  para un Real Madrid superior y honor para un Atlético que cayó de pié.

 A los 42 minutos, se esfumaron las esperanzas rojiblancos con el gol de Isco que tuvo en Benzema al  gran protagonista. La jugada del francés es para enmarcar, es puro arte. Una obra suprema de un jugador que tiene tanta calidad como parsimonia. Lo suyo no no es la pelea ni la constancia y por esta razón el Bernabéu  no soporta muchas veces su apatía, pero clase tiene para aburrir. Esta inmensa calidad apareció en el Calderón en el momento justo, cuando más lo necesitaba su equipo. Eliminó a tres rivales sobre la cal de la línea de saque de esquina,pase atrás para Kroos que dispara respondiendo Oblak con una espectacular  parada. Pero como esa jugada merecía ser gol, ahí estaba Isco para recoger el rechace y marcar el 2-1 que dejó helado al Calderón y al Atlético que ya no fue el volcán de los primeros quince minutos. Ya nada fue igual. Un gol que vale una final. Una derrota nunca fue tan dulce para el Real Madrid.

   No obstante, el Atlético seguía apretando los dientes en cada entrada y llevó al límite las decisiones del árbitro, superado por unos y otros en las protestas. Hubo entradas feas de un lado y de otro y el partido se embruteció porque el Atlético propuso y el Madrid no se arrugó.  Al Atlético, tal vez le sobraron algunas entradas que rayaron en la violencia.Godin y Gabi rozaron la expulsión.

   El Cholo Simeone, una vez más con sus soflamas coléricas  que llaman a la épica, lo único que consiguió es que sus jugadores jugasen de una forma muy acelerada y hasta crispante,dejándoles sin resuello. Ya huele, la filosofía parda de Simeone. Debe saber que para eliminar al Real Madrid que llegaba con un 3-0 a su favor, más que rituales que claman por la machada, hacen falta argumentos futbolísticos. El Atlético, lo siento, no tuvo  argumentos en el cómputo total de la eliminatoria. El Real Madrid ha sido mejor y con total justicia se mete en la final. En esta ocasión el talento se impuso a la pasión.

    Tras el descanso el partido fue lo que se presuponía. El Atlético se quedó sin fuerzas. Pagó caro el esfuerzo de los primeros 20 minutos, sobre todo Griezman que ha llegado a este tramo final fundido. El Madrid, fresco como una lechuga, tenía la pelota y el dominio de la situación. Gozó de alguna oportunidad para empatar como en un cabezazo de Benzema y en jugada personal del mismo francés. Pero el caso, es que el Atlético tuvo dos oportunidades de meterse en el partido. En ambas ocasiones, una de Carrasco y otra de Gameiro, Keylor Navas, el protagonista madridista en el segundo periodo, respondió con dos espléndidas intervenciones.

    Por encima de pancartas absurdas por uno y otro bando; y de proclamas que solo acarrean violencia, estuvo el orgullo de dos grandes equipos que nos brindaron una apasionante noche que sirvió para despedir con todos los honores al histórico Vicente Calderón. Hasta la intensa lluvia del final del encuentro quiso rendirle homenaje. Como homenaje le brindó la afición atlética a sus jugadores por su entrega y por lo logrado hasta ahora, que es mucho

   En una noche extraña pero bonita, el Real Madrid  también salió a saludar a su afición y a  plantar su bandera en el césped del Calderón.

    El finalista, justo y merecido, pasó el susto y peleará por la Duodécima. La Juventus, 19 años después, busca la revancha de aquella final perdida (1-0) contra el Real Madrid en el Arena de Ámsterdam,año 1998 (que recuerdos, fue mi debut en TVE).

    Cardiff, acogerá una gran final: Real Madrid-Juventus de Turín. 

Entrando en la página solicitada Saltar publicidad
Advertisement Advertisement Advertisement Advertisement