Opinión

Santa y cervantina primavera

Una nueva Semana Santa ha florecido con la llegada deesta primavera recién estrenada de luna llena y noches frías en las que se agradece el calor que desprenden las velas y cirios que portan los hermanos en procesión. Estas manifestaciones sociales, históricas, artísticas y religiosas reportan importantes beneficios a nuestra economía a través del turismo, que los expertos definen como “industria sin chimenea”. Pero no se crean, que ya desde el siglo XVI se producen estos desfiles procesionales que provocaban el natural tránsito de personas a lugares donde estas cobraban mayor relevancia, al igual que sucedía con la peregrinación a: Jerusalén,Roma o Santiago de Compostela. Y hasta Cervantes ya se hace eco de alguna de estas manifestacionesen el episodio de la procesión de disciplinantes que aparece en El Quijote (Parte I, cap. 52).
Siguiendo con Cervantes y los fastos de este cuatrocientos aniversario de su fallecimiento, ya está inaugurada uno de los platos fuertes de este año cervantino, la exposición que la Biblioteca Nacional ofrece hasta finales del mes de mayo donde se nos disocia el hombre, el escritor y el mito...tres personas en un solo ser universal, que con sus obras –no sólo el Quijote- es una de las “marcas” España más valiosa que nos identifica. También su “casa natal” en la ciudad complutense continúa con actividades en honor de su paisano más ilustre, en esta ocasión se puede contemplar la obra gráfica, que sobre el Quijote ilustró otro insigne manchego: Gregorio Prieto. Tampoco estaría de más que hiciésemos un periplo por las “casas de Cervantes” (Alcalá de Henares, Valladolid y Esquivias), que a la postre supone recorrer los lugares donde tuvieron lugar sus aventuras, porque su vida no deja de ser una espléndida novela de aventuras donde él mismo es el protagonista y que no debemos dejar de “leer”, en este caso visitar.
Es en abril cuando se cumple la fecha que da motivo a todas este año, por lo que vamos a tener un verdadero bombardeo de actividades que debemos vivir ya sea en nuestro pueblo, capital, Comunidad Autónoma o en cualquier otro lugar donde se invoque a este genio inmortal, que renace con toda su fuerza en una primavera frutera y huertana, ensalzada en Cáceres, Murcia o Tudela y donde también brotarán exaltaciones marianas desde la Pascua de Resurrección hasta Pentecostés donde hará cumbre.
 

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