Una de las fiestas más antiguas de la provincia de Cuenca, "La Endiablada" se suma a tantas fiestas de nuestros pueblos que se han tenido que suspender debido a la pandemia por el coronavirus.
Así lo han publicado a través de un comunicado oficial. Tal y como han indicado, "Se trata de una decisión difícil y meditada". Priorizando la salud de toda la población, se ha decidido suspender la fiesta.
Sabiendo que el culto a San Blas y a la Virgen de la Candelaria es muy grande tanto en el pueblo como en el resto de la comarca, la mejor decisión ha sido suspenderla. Además, las medidas restrictivas que se están imponiendo para reducir el número de contagios en toda la Comunidad, seguro que también limitarían la celebración y el culto a los patrones.
"Se ha concluido que la prioridad es la salud pública, debiéndose adoptar y extremar todas las medidas a nuestro alcance para la protección de la población”.
