Los chavales de Miguel Esteban están disfrutando de un verano de lo más completo. Hoy ha terminado el campamento urbano gracias al cual han podido pasar una jornada juntos hasta en el momento de cerrar los ojos. La Concejalía de Juventud les invitó a pasar el lunes con una programación cargada de actividades en grupo y con una velada nocturna en la pista municipal.
Todo empezó a las 10 de la mañana al comienzo de la semana, cuando los niños se despidieron en la Iglesia de San Andrés de sus familiares. La toma de contacto entre ellos no fue difícil, compartían interés por los juegos que se les propusieron: competiciones donde tenían que mostrar sus habilidades físicas, juegos en la piscina y en el parque, así como talleres para demostrar sus habilidades artísticas y vocales con un karaoke o diferentes bailes organizados.
El campamento transcurrió en un ambiente fabuloso entre los acampados lo cual dio lugar a muchos momentos divertidos y que hicieron que el día pasará rápidamente entre los más pequeños, ya que para la mayoría de ellos era su primera salida.
Además, como novedad este año, la comida no tuvo lugar en la piscina como en otras ocasiones, sino que se realizó en el hotel El Torreón. Por otro lado, la Concejalía ha contado con la ayuda de de 9 voluntarios y 3 universitarios contratados este verano por el Ayuntamiento.
