El objetivo de esta acción es sanear los propios árboles así como potenciar la seguridad de los vecinos, evitando los daños que las ramas y hojas pueden causar en viviendas, vehículos o las propias personas. Simón ha destacado, además, que esta labor se ha desarrollado con medios propios, con lo cual supone un importante ahorro económico para las arcas municipales.
La campaña de poda ha permitido llegar a la práctica totalidad de los barrios del municipio en los que existen árboles que requerían estos trabajos.
Como ya se ha hecho en los últimos años, y debido a los buenos resultados conseguidos, la última fase de la campaña está consistiendo en la reducción de las copas de una veintena de grandes pinos. En este caso se está actuando en pinos de la avenida de Madridejos, concretamente en la zona de Puertas San Rafael, y se terminará en varios pinos del barrio de las Casitas Blancas.
Estas labores consisten en reducir las copas de los pinos, de tal manera que se le quitan entre 400 y 500 kilos de peso, lo cual mejora el estado del árbol y la seguridad a la hora de evitar caídas de ramas o del propio árbol.