La liga,cambia de color. Del azulgrana pasamos al blanco del Real Madrid que de momento manda en la clasificación con un punto de ventaja sobre el Barcelona que perdió en su visita al Bernabéu por 2-0, con goles de los insospechados Vinicius y Mariano.
Este Real Madrid con muy poco alcanzó el liderato, ante un Barcelona muy pobre que después de de cuatro años sale escaldado del Santiago Bernabéu .
Vinicius, que está llamado para grandes aventuras del Real Madrid fue quien decidió esta clásico.El, y solo él fue quien revoluciono el encuentro con el 1-0. Tanto que consiguió con gran personalidad, esa que le faltó en los últimos partidos. Esa personalidad, que como un fantasma , sin apenas notarse dejó su impronta para dejar su sello en este clásico que con su alegría lo hizo cambiar.
Vinicius, al que muchos pronosticaban como un bulto sospechoso, revolucionó el clásico con un gol y una actuación llena de efervescencia que dejó sin argumentos a un Barcelona que después del primer tiempo desapareció como equipo menor. Messi, estuvo ausente y se notó.
El gol del brasileño Vinicius, junto al segundo conseguido por el proscrito, Mariano, devuelve el liderato al Real Madrid y esa confianza que necesitaba los de Zidane tras los últimos varapalos.
Zidane, en esta ocasión se dejó de pruebas y apostó por la alineación más lógica, y ganó. En esta ocasión, la confianza, con lo que debe ser el once titular prototipo, tuvo el resultado positivo de ganar 2-0 al Barcelona y situarse como líder solitario.
Zidane,el borde del precipicio, miró a lo que tenía entre sabanas y recuperó a Mariano como ese goleador que le falta a este Real Madrid seco a la hora de definir
Pero antes de todo eso, Zidane, en una jugada muy arriesgada se la jugó con Vinicius. Un líder,valiente en el uno contra uno, que no transmite miedo y y que juega al borde del precipicio. La jugada, le salió a la perfección con este chaval de apenas 20 años que cambió la suerte del clásico que ha devuelto la algaida al Real Madrid, cuando más la necesitaba.
Ese chico,imberbe con una sonrisa abierta, estuvo muy por encima de Messi, que no compareció por el Santiago Berbabeú.
El Brasileño, con sus defectos y virtudes, demostró la pasión que no tiene Bale. Demostró esa voluntad de jugar cada acción como si fuera la ultima. Lo mismo hizo Mariano, un desaparecido por arte y capricho de Zidane, que hizo buena la prueba de vida a la que le sometió el técnico madridista.
Esa fe inquebrantable fue lo mejor de este Real Madrid que en la segunda parte se impuso a un frío Barcelona que demostró que no está en su mejor momento.
Si, un chaval de 19 años como Vinicius se reivindicó en todo un Coliseum de Chamartin; Mariano se hizo mayor con su fe para ser ese goleador que tanto necesita el Real Madrid. Pero eso si, Antes el Barcelona fue mejor que él Madrid en el primer tiempo sostenido por Busquets y Arthur con Piqué en la retaguardia. Griezmann se movía como una Paloma que revoloteaba sin la bendición de Messi, menos amenazante de lo habitual.
En el primer tiempo, el Madrid paso de puntillas en el partido. Courtois detuvo dos balones a Messi, el segundo en una parada tremenda y ganó un mano a mano a Arthur- El Madrid, un tanto desestabilizado, pedía urgentemente el descanso que le vino de perlas.
Necesitaba un descanso el equipo de Zidane, y, lo aprovechó, porque regresó con nuevos bríos y consiguió arrebatar al Barcelona no solo la posesión del balón sino la iniciativa y la intensidad.
Zidane, que muchas veces mira al precipicio, apostó por un chaval de 19 años, Vinicius, Lo hizo como hace todo lo demás, sin alterarse y sin transmitir ni una gota de miedo. Sabe, que el brasileño transmite la pasión que le falta al frío Bale y que se juega cada balón como si fuese el ultimo que se jugase. Hay pasión, y fantasía en cada toque que protagoniza. Marcó el 1-0, y ahí se hizo la luz para un Madrid. Lo mismo hizo Mariano, un subalterno en busca de una prueba de vida que con una fe inquebrantable, cuando no cuenta para nadie, puso el 2-0 que cerraba el clásico a favor del Real Madrid que vuelve a la primera posición de la clasificación..
El partido comenzó con un paso hacia adelante del Madrid y otro hacia atrás del Barça. Zidane puso a Marcelo como escolta de Vinicius para tirarse al cuello de Semedo, el flanco por donde blandea el Barça. Y Setién se ahorró al tercer punta para meter a Vidal como cuarto centrocampista, el de más colmillo, por cierto. El inicio evidenció que el estado de necesidad del Madrid andaba un punto por encima de un Barcelona con poca personalidad y con un Messi sin protagonismo y al que Casemiro,esta vez, sujetó de maravilla.
En el segundo periodo, el Barça se quedó sin balón y sin horizontes mientras que el Madrid le ponía corazón. Esa pasión de los blancos, olvidando sus crisis reciente,, se llevó por delante al Barcelona de forma arrebatadora y hasta descamisado para ganar al equipo azulgrana de una forma inapelable.
Es curioso esto del fútbol, donde no llegó el máximo goleador de la liga,Messi, llegaron dos jugadores que estaban levantando muchas sospechas: Vinicius y Mariano. El primero con el involuntario rechace de Piqué y el segundo con el partido en su último trecho. Dos goles inesperados que le sirven al Madrid para recuperar el aire perdido y alcanzar el liderato en solitario con un punto de ventaja sobre su máximo rival.
Fue la respuesta en un partido donde el Madrid estuvo tieso en el primer periodo ante la mejor presencia del Barcelona; pero en el segundo periodo se volvieron las tornas y los de Zidane se saltaron el guión y se convirtió en un equipo con más autoridad y energía que empequeñeció al Barcelona, que volvió e emitir señales de equipo endeble, donde Messi apenas tuvo presencia..
La derrota del Barcelona tendrá consecuencias para Quique Setién, el gran señalado por una alineación muy conservadora ( con Arthur,Busquets,De Jong y Arturo Vidal. Solo Messi y Griezmann en la delantera. Setién, que pregonaba el buen fútbol, la posesión y el dominio, se va del Bernabéu sin marcar. De un estadio donde el Manchester City y el Celta hicieron dos golees cada equipo en sus últimas visitas.
En un momento delicado, el Real Madrid tiro de orgullo que no de buen juego para imponerse a un Barcelona con poca personalidad. Los de Zidane estaban obligados a no volverá fallar en su estadio y dejar que su gran rival se escapase con cinco puntos de ventaja.
La victoria y el liderato, quedó sellada con el gol de Mariano, la gran sorpresa en la convocatoria,que aprovechó su oportunidad en una gran carrera para sentencia el encuentro. Y es que Mariano, juega con hambre y en esta ocasión no perdonó para dar la puntilla a un Barcelona bastante desdibujado.
El clásico revitaliza al Real Madrid . El equipo que estaba tieso ante el gol se encuentra que por fin,marca Vinicius y recupera a uno que estaba en el cuarto oscuro, Mariano. Debe ser la suerte de un Zidane que con una alineación más lógica, con Kroos como titular,volvió a ganar.