Es la pareja del año de la liga. Vinicius-Benzema, Benzema- Vinicius, tanto monta uno como otro. Esa perfecta sociedad que forman el francés y el brasileño, fue la que le sacó las castañas del fuego al Real Madrid que venció (0-1) a un competitivo, correoso y buen Rayo Vallecano, en el estadio de Vallecas.
Tanto Benzema como Vinicius, no estaban teniendo su tarde, apenas habían aparecido. Pero, casi siempre se encuentran hasta cuando parece que no están. Estaban pasando desapercibidos e incluso hubiesen merecido la sustitución en lugar de Asensio, que fue el jugador más activo de la vanguardia madridista y que cada día busca ser más protagonista.
Cuando el encuentro languidecía (minuto 82), apareció Benzema, con esa delicadeza tan suya metió un balón imposible por el ojo de una aguja a Vinicius. El brasileño, con una pared perfecta,se lo devolvió para que el francés marcase a puerta vacía. Fue la mejor jugada de un partido que fue muy disputado de principio a fin.
El Rayo se comportó como lo está haciendo toda la temporada, con una fe encomiable y haciendo un buen fútbol cargado del energía y entusiasmo. Le exigió un gran esfuerzo a un Madrid que tuvo que tirar de pico y pala para finalmente imponerse. Hay partidos que no dan para hacer florituras y si para esfuerzos. A los equipos campeones también se les mide en partidos con tanto hueso y enjundia. En encuentros como este con campos complicados por sus medidas y césped, es donde se ganan las ligas.
El Madrid comenzó el partido con mucho ritmo. Asensio tuvo dos buenas ocasiones que el ágil de Luca Zidane, le respondió con dos buenas paradas. Pero poco a poco, el Rayo comenzó a cogerle el pulso al partido. Ese delantero, que remate todo llamado Guardiola, llevó la inquietud a la defensa blanca que vestía de azul.
Era un Rayo muy intenso, aunque el equipo de Ancelotti no le perdió el pulso a la propuesta rayista. El único que desentonaba era Casemiro, que en los primeros 17 minutos ya había perdido tres balones muy comprometidos en el centro del campo. Estuvo, además de lento, muy torpe. El medio volante brasileño está muy impreciso y tal vez un tiempo en el banquillo no le vendría mal.
La entrada de Valverde en la segunda parte como sustituto de Casemiro, fue aire fresco para el centro del campo madridista. El uruguayo dio alas al Madrid que ya fue mejor equipo que un Rayo que ya empezó a dar signos de fatiga. No obstante, con sus armas siguió en la pelea con mucha fe en sus posibilidades.
Fue un encuentro muy entretenido ente un valiente Rayo y un Madrid trabajador. Los locales exigieron mucho a su rival, y si no que se lo pregunten a Courtois, quien de nuevo resultó decisivo para su equipo con dos grandes intervenciones. La primera, a un cabezazo de Mario Suárez; y después, a dos remates a quemarropa de Trejo y Álvaro García.
El problema del Rayo es que no tienen a un Benzema en su filas. A pesar de no ser el mejor día del francés, siempre encuentra su momento en el partido. Benzema fue quien se inventó el gol, con Vinicius como colaborador necesario. Su gol lo cambió todo . Courtois, con dos grandes paradas, hizo el resto para que el Real Madrid ganase el partido y de paso fortalezca su liderato, con esa pareja del año que es la esperanza de futuro ante lo que se avecina.
