Partidazo el que vimos en el estadio de La Cerámica, donde el Villarreal se impuso 2-1 al Real Madrid, en un choque de ida y vuelta que fue todo un monumento al fútbol total, lleno de velocidad y plasticidad.
El estupendo encuentro se lo llevó el valiente y chispeante Villarreal, frente a un Real Madrid que defendió de oído y que Salió con una gran empanada mental, sobre todo Rúdiger que en tres minutos tuvo tres errores en la entrega que le pudieron costar caro a su equipo. Todo lo contrario que el Villarreal, que lo hizo en plan explosivo y con una presión muy bien trabajada.
Al equipo de Ancelotti, no le alcanzó ni para el empate y mucho menos para la victoria. En un día día histórico para la entidad madridista. Por primera vez el Real Madrid en sus 121 años presentó un equipo titular sin españoles. Increíble!! Es la globalización llevada al grado extremo
El hermoso partido tuvo de todo. No faltó la polémica del dichoso VAR , con dos penaltis absurdos de esos del nuevo reglamento que nadie entiende. A este paso, los futbolistas van a tener que cortarse los brazos para evitar esas manos. Vamos, como si fuese un fútbol- futbolín.
El Villarreal salió derrochando entusiasmo, mientras que el Real Madrid lo hizo encogido y sin colocación. Todas las disputas eran para los amarillos que comenzaron enrabietaos. Algo que no supieron aprovechar. Coquelin,pudo marcar de tacón pero el palo le privó del gol de la jornada. Era un no parar de los de Quique Setien que anudaron a Rüdiger,Tchouameni y Militao -lateral derecho como lo hizo con Brasil. No había tregua por parte de los amarillos que desbordaron a los madridistas con un ritmo infernal y con llegadas de todos los colores, bajo la exquisita batuta de Gerard Moreno, el mejor del partido, junto a la pausa que le ponía Parejo.
Del explosivo Villarreal del comienzo, se pasó a un Madrid que le cogió el pulso al partido y aceptó el reto de ida y vuelta que fue en lo que se convirtió el hermoso encuentro. Modric, comenzó a asociarse con Kroos y el Real Madrid apareció. El croata, fue protagonista de esas jugadas que solo Modric y muy pocos, pueden hacer. Su pase con el exterior entre las piernas de Moreno fue a parar a Militao que no pudo pasar a Benzema por culpa de un Albiol, que estuvo de 10, abortando una buena ocasión; como la que tuvo Vinicius a pase del francés, que Reina desvió con el pie.
Y es que el partido era un festival, con viajes constantes en un área y otra, aunque Courtois tenía más trabajo que Reina. A Benzema se le fue alto un remate franco;Militao se entretuvo demasiado mientras encaraba a Reina; Courtois le ganó un mano a mano Yeremi Pino; Alex Baena (espléndido jugador) lo intentó desde fuera del área…. Casi toda la producción el Villarreal llevaba la firma del majestuoso, Gerard Moreno.
Sorprendentemente, la primera parte finalizó con (0-0). Del descanso, el Real Madrid volvió a salir tan descuidado como inició el primer periodo. Esta vez fue Mendy -jugador sin caché para estar en el Real- quien cometió un error grosero, en un pase sin presión que llegó a Gerard Moreno quien a su vez abrió a Yeremi Pino. El remate lo desvió Courtois, pero Mendy, para terminar la faena, acabó empujando el balón a la red.
El gol despertó al Madrid, que empató muy pronto tras un penalti que, en principio, solo vio Vinicius. Foyth extendió el brazo para intentar obstaculizar con tan mala fortuna que el balón le golpeó en la mano, de forma natural. Penalti de VAR y gol de Benzema.
Tres minutos después llegaba otro penalti absurdo. Alaba se escurre y el brazo con el que intenta incorporarse, recibe el impacto del disparo de Foyth que le da en la mano derecha a un palmo del suelo. Gerard Moreno, se encargó de transformar la pena máxima en el 2-1.
Tanto este, como el que se pitó contra el Villarreal, si hubiese lógica, no se tendrían que haber pitado. Alguien tiene que arreglar este disparate.
Con desventaja en el marcador, Ancelotti tiró de energía para levantar a los suyos. De golpe, alteró toda la defensa, con Lucas y Alaba de laterales y Rüdiger y Militao de centrales. Rodrygo, que flirteó dos veces con el gol, entró por Tchuaméni y Camavinga por Modric.
Vinicius, el más guerrero, lo intentó de todas las formas posibles. Unas veces pararon bien al brasileño y otras, por detrás de la ley. El partido era frenético, el Real cargaba con todo; el Villarreal, ya jugaba a la contra y tuvo hasta dos ocasiones para aumentar el marcador, una de ellas a puerta vacía por parte de Danjuma; y otra, tras jugada maradoniana de Pedraza.
El Real Madrid,llegó tarde a un partido tremendo. No se puede decir que jugase mal, pero tampoco bien. Defendió muy mal y en la derrota tuvo la penitencia. Jugó con las líneas muy separadas, dejando muchos espacios al contrario, que se aprovechó con infinitas llegadas a las inmediaciones de Courtois. Eso, un equipo como el Real, no se lo puede permitir.
Toca reflexionar el por qué defendió tan mal. Además hay jugadores que han bajado de nivel y ante lo que se avecina, es para preocuparse.
