Los regalos de empresa son una forma fantástica de recompensar a tus empleados y de fidelizarlos e implicarlos con los objetivos de la compañía. Todo el mundo aprecia un regalo y su entrega fomenta una conexión más significativa entre la dirección y el personal.
Por esto, hoy queremos ofrecerte algunos consejos que, gracias a la ayuda y experiencia de una empresa especializada en este tipo de regalos como es Montamar, sabemos que te serán muy útiles.
Elige un regalo personalizado
Los regalos genéricos dan la impresión de que no haberse tomado muchas molestias en prepararlos. Personalizar un artículo con un nombre o incluso con una simple nota marca la diferencia y permite que los empleados sepan que realmente se ha pensado en ellos.
Personalizar regalos puede llevar mucho tiempo, pero para eso es posible encontrar soluciones fáciles como son las cajas de regalo para empleados, que es una solución fácil y práctica para resolver este problema.
Regalar algo práctico
Los regalos llamativos pueden ser emocionantes en el momento de la entrega, pero algo práctico y útil será más apreciado a largo plazo. Las prendas de vestir, los aparatos electrónicos e incluso los paquetes de experiencias para un fin de semana no son cosas que se puedan guardar en un cajón y luego olvidar. Piensa en lo que tus empleados van a utilizar y deja que ese conocimiento te sirva para elegir tus regalos.
Regalos de larga duración
En la misma línea, los regalos desechables se usan rápidamente y se olvidan. Algo más duradero, como un adorno o un reloj, seguirá dando resultado durante años. Este tipo de regalos son excelentes opciones porque fomentan la lealtad a la empresa. Destacan el tiempo que un empleado lleva en la empresa. Cuando ese empleado se jubila, el regalo se convierte en un bonito recuerdo de una carrera larga y feliz.
La lealtad a la empresa es difícil de conseguir hoy en día en un mercado laboral cada vez más fluido, pero los regalos duraderos ayudan a los empleados a sentirse queridos.
Regalos colectivos o familiares
En lugar de hacer regalos puramente individuales, piensa en el uso que las familias de sus empleados podrían hacer del regalo. Los días de experiencia son una opción obvia, pero los aparatos electrónicos y los electrodomésticos tienen una amplia utilidad.
Los regalos compartidos ponen de manifiesto que diriges una empresa familiar que se ocupa no sólo de los empleados individuales, sino también de sus seres queridos.
Calcula el presupuesto previamente
La compra de regalos tiene, por supuesto, un impacto presupuestario. Gastar en exceso en artículos de lujo puede hacer felices a tus empleados, pero puede hacer mella en las finanzas de la empresa. Sin embargo, eso no significa que no puedas ser generoso.
Elabora un presupuesto realista que detalle cuánto puedes gastar. A partir de ahí, compara precios entre distintos proveedores, mira si puedes conseguir descuentos por volumen y, en general, intenta sacar todo lo que puedas de tu presupuesto.
¡Regala de forma inesperada!
La mayoría de las empresas hacen regalos en momentos bastante predecibles, por ejemplo, en Navidad o a final de año. Los empleados aprecian el gesto, pero hay algo aún más especial: sorprender a tu personal.
Dar regalos para celebrar un objetivo importante conseguido por la empresa o para celebrar un gran negocio demostrará que los empleados siempre están en la mente de la empresa, no sólo durante las fiestas.