Horcajo de Santiago tiene una fecha y una hora claras en el calendario, el 7 de diciembre a las 8 de la tarde.
Un año más el canto de la Salve y los vítores a la Virgen resonaron en la Iglesia Parroquial de Horcajo de Santiago. El año pasado, por las restricciones sanitarias, dentro de la Iglesia no había nadie en el momento del canto de la Salve, pero este año se ha recuperado esa tradición, y el Vítor ha vuelto a la normalidad.
A las ocho de la tarde se cantó la Salve, pero no fue hasta las 21.30 horas cuando el estandarte, en manos de su portador Joaquín, salió a la puerta de la Iglesia, donde le estaban esperando sus portadores en la Puerta del Sol, encima de sus caballos.
Ahí daba comienzo la procesión más larga de la cristiandad por las calles de Horcajo de Santiago. Fue una procesión intensa donde la lluvia estuvo presente en gran parte del recorrido, pero eso no impidió que los horcajeños lanzasen sus vítores igualmente.
La entrega del estandarte de nuevo a la Iglesia fue alrededor de las 18.30 horas de día 8. Una entrega muy emotiva, cuando los portadores del estandarte y las borlas devolvieron a Joaquín el estandarte, poniendo fin a una de las experiencias más bonitas de sus vidas.
A las 20 horas la imagen de la Inmaculada Concepción salió en procesión por las calles de la localidad, para llegar de nuevo a las Iglesia sobre las 21.30 horas, acompañada de la Asociación Cultural Musical La Concepción al ritmo de la Marcha Real. De nuevo, volvió a cantarse la Salve y los vítores a la patrona. Y a las 22 horas, tuvo lugar el espectáculo de fuegos artificiales.
Este viernes 9 de diciembre se celebra el día de La Virgencilla, donde se recuerda a todos los difuntos. Y este domingo, también tendrá lugar la tradicional rifa con productos típicos donados por diferentes empresas.
