La localidad toledana de El Toboso inauguró la pasada noche del domingo sus fiestas en honor a San Agustín. El pueblo lleva inmerso en una programación de actividades para todos los vecinos desde la semana pasada como previa a estos días de feria que comenzaron con el tradicional corte de cinta por parte de la alcaldesa y el relevo de la Dulcinea y sus Damas, uno de los eventos más emotivos del año.
La noche comenzó con un pasacalles a cargo de la Asociación Musical Santa Cecilia que fue recorriendo el municipio para anunciar que se aproximaba el comienzo de la feria. Tras recorrer las calles toboseñas terminaron su recorrido en el Ayuntamiento donde se hizo la recepción de autoridades y de la Dulcinea y las Damas, tanto las del año anterior como las del 2023. Entre las autoridades presentes destacó la presencia de los diputados provinciales María Pilar Martín, Manuel Galán y Dolores Verdúguez, el equipo de gobierno toboseño, los concejales del consistorio y diferentes autoridades, tanto toboseños como de municipios vecinos de la comarca, que no se quisieron perder el inicio de la feria. Todos juntos desfilaron hasta la Plaza Juan Carlos I, al pie de la Iglesia San Antonio de Abad, donde los vecinos estaban abarrotando la plaza.
Tras el corte de cinta por parte de la alcaldesa, comenzó el acto del relevo de Dulcinea y sus Damas. Primero el pueblo despidió a la Dulcinea y sus Damas del 2022 y, tras esto, dio la bienvenida a las del 2023 que representarán al pueblo en los actos y eventos que se celebren llevando la imagen de la juventud, la jovialidad y la belleza. Así pues, El Toboso nombró Dulcineas infantiles a Aitana Arinero Martínez-Santos, Emma Fuentes Esquinas y Lorena Esquinas Cano. Como Damas los presentes aplaudieron el nombramiento de María Sanz Cobo, Paula Lerdo de Tejada Martínez y María Ferrero Panduro. El momento estrella de la noche se produjo con el relevo de Dulcinea y durante este año Natalia Muñoz Muñoz será la emperatriz de La Mancha.
Tras el nombramiento el protagonismo pasó para Manuel Fuentes Muñoz, pregonero de la feria. Manuel comenzó reconociendo que para él es un privilegio poder dar el pregón en su pueblo y aseguró que “no he olvidado mis raíces toboseñas que siempre he llevado con orgullo”. El pregonero también alabó el “patrimonio inmaterial de la humanidad que tenemos en nuestro pueblo y que hay que agradecer a todos los que nos han precedido y que nosotros tenemos que mantener y ampliarlo para entregárselo en las mejores condiciones a las siguientes generaciones”. Fuentes también tuvo palabras para la intensa actividad cultural en sus diferentes manifestaciones de El Toboso y, como no podía ser de otra manera, recordó a la ilustre Dulcinea creada por Miguel de Cervantes explicando su posible origen y la relación que han tenido escritores ilustres con El Toboso. Para terminar, se valió de la frase de Rainer Maria Rilke: “La verdadera patria del hombre es su infancia”, para recordar sus momentos felices de niño en El Toboso e hizo memoria de cómo era el pueblo por aquellos años y todo lo que ha avanzado.
Una vez terminado el pregón, la alcaldesa de El Toboso, Pilar Arinero, subió al escenario para entregar un obsequio al pregonero y agradeció a todos su presencia. Arinero comenzó dirigiéndose a las autoridades e hizo un llamamiento a la unidad de todos los municipios vecinos de la comarca para seguir creciendo juntos. Tras esto, agradeció a sus vecinos la confianza que han vuelto a depositar en su equipo de gobierno y mencionó algunas de las obras en infraestructuras que están previstas como la nueva depuradora compartiendo que “invertir en nosotros es invertir en nuestro futuro”. Por último, invitó a todos los vecinos a dejar a un lado las preocupaciones del día a día y disfrutar de la feria con una frase del propio San Agustín: “El pasado ya no es y el futuro no es todavía”.
Con esa invitación al disfrute comenzaron tres días de feria que se prolongarán hasta e próximo 30 de agosto y que llenarán el municipio de actividades culturales, deportivas y gastronómicas de las que podrán disfrutar todos los públicos y rematado cada día con un baile popular en la plaza.
